¿Cómo dar nombre a una empresa cuya misión es secuestrar CO₂ y restablecer el equilibrio de nuestra atmósfera? ¿Cómo destacar nuestro compromiso con las soluciones basadas en la naturaleza como la forma más eficaz de alcanzar este objetivo?
A diferencia de los animales, los árboles nunca dejan de crecer. Su Cambium, la capa de células no especializadas situada bajo la corteza, permite a los árboles aumentar de volumen generando nuevos tejidos como el xilema y el floema.
El Cambium es, por tanto, el principal tejido responsable del secuestro de carbono, ya que las células especializadas que derivan de él consolidan los azúcares que se crearon durante la fotosíntesis, transformándolos en lignina y celulosa, biopolímeros que fijan y almacenan el carbono que los árboles captan del CO₂ atmosférico.
Además de su significado botánico, la etimología latina de Cambium significa cambio.
Por eso decidimos que este término describe a la perfección nuestro compromiso con el cambio positivo, impulsado por la innovación y el respeto al papel de la naturaleza en la construcción de un futuro sostenible.